Apenas arranco oficialmente el proceso electoral en Chiapas y comenzaron a moverse muchas fichas que se habrán de acomodar para el próximo año, empezando con el asunto de las candidaturas independientes donde ya diversos personajes estatales y nacionales tienen en su mano la constancia que los acredita como aspirantes, pues hay que recordar que el próximo primero de noviembre inicia también el proceso federal.
Pero mientras que unos renuncian a sus puestos, otros recorren el país, como es el caso de Marichuy, la aspirante a la candidatura independiente a la presidencia de la república por parte del Concejo Nacional Indígena.
Hasta ahí digamos que el escenario va caminando tal y como lo marcan los tiempos electorales, salvo las broncas que traen diversos partidos políticos, pero lo que definitivamente no se vale, es que a estas alturas ya comenzó la guerra sucia con el supuesto hackeo a las cuentas de twitter de Ricardo Anaya del Partido Acción Nacional y en Chiapas con el escandalito en el PRI.
Y es que entre dimes y diretes diversos alcaldes denunciaron que ese partido político los chamaqueó extorsionándolos a lo que su dirigente pidió a la fiscalía investigar los dichos de los alcaldes de Zinacantán y Larráinzar.
Pero de ese tipo de guerras sucias la sociedad ya está harta y lo que urge en este momento es que alguien les vaya a poner en orden antes de que le sigan subiendo de tono, pues no hay que olvidar que ya no estamos en los tiempos donde con paquetes de molinos o una torta y un refresco alguien podría ser capaz de ganar una elección…