La vigilancia para cuidar la calidad y sanidad en los cárnicos es permanente y las jurisdicciones sanitarias realizan las inspecciones dos veces al año en los centros de matanza de las reses, aseguraron autoridades de salud en Chiapas.
Por lo menos en este 2022, según la información oficial, ninguno de los 39 lugares (entre centros de matanza y mataderos que son legales) se han suspendido. De hecho, cuando ocurre alguna irregularidad, primero se busca que el sitio corrija ese detalle, lo que menos se quiere es que surjan espacios ilegales para matar las reses.
Que los animales se revisen en la parte exterior (para asegurar que no vayan golpeados y que estén en buenas condiciones), que los establecimientos cuenten con un médico (para que se encargue de hacer los análisis de sangre) y también con un pistolete para que los ejemplares no sufran a la hora del sacrificio, son algunas de las situaciones que revisa la autoridad.
Gerardo Castilejos Castillo, verificador sanitario en la Dipris, comentó que también, y para cuidar la sanidad en el producto que consumirá la población, se cuida el proceso de traslado de las reses, tienen que ir en gancho para que el animal no tenga contacto con la superficie y se evite algún tipo de contaminación.
Informa: Adolfo Abosaid