El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió hoy una investigación “transparente e independiente” sobre los incidentes en Venezuela, en particular, en relación a las víctimas de las protestas antigubernamentales.
Pidió a todos los actores “dismin
uir las tensiones” y hacer todo lo posible para prevenir la violencia y evitar cualquier escalada, según una declaración emitida en Davos (Suiza), donde Guterres pronunciará este jueves un discurso en el Foro Económico Mundial.
De acuerdo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el número de muertos en los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad en Venezuela asciende a 16.
“CIDH sigue de cerca los graves hechos de violencia en Venezuela en el contexto de las manifestaciones de hoy, que ya han generado al menos 16 muertes, decenas de heridos y detenciones”, indicó la organización a través de su cuenta en la red social Twitter.
Según organismos no gubernamentales y fuentes de la oposición en Venezuela, al menos 13 personas murieron y decenas resultaron heridas o detenidas durante las protestas de este miércoles, en más de 60 ciudades del país.
La CIDH hizo un llamado al Estado venezolano a respetar la libertad, la vida y la integridad de los manifestantes que han salido a las calles durante la jornada de movilizaciones a favor y en contra del presidente Nicolás Maduro.
Previamente, la Organización de Naciones Unidas (ONU) llamó a las partes en conflicto en Venezuela a evitar una escalada de la violencia y a iniciar “negociaciones políticas inclusivas” para abordar los retos en el país, donde el líder opositor legislativo Juan Guaidó se proclamó “presidente interino”.
El portavoz del secretario general de la ONU, Farhan Haq, recordó que el organismo rechaza “cualquier tipo de violencia política” y pidió a “todos los grupos en el terreno” que reduzcan las tensiones y se esfuercen “para evitar una escalada”.
El vocero indicó que la ONU sigue de cerca las protestas y manifestaciones en el país sudamericano, y reiteró su pedido a las partes en conflicto para que “se comprometan a unas negociaciones políticas inclusivas y creíbles” que respeten “el Estado de derecho y los derechos humanos”.
El llamado de la ONU se produjo luego de una tensa jornada de manifestaciones en las que el oficialismo expresó su respaldo al reelecto presidente Nicolás Maduro, mientras que la oposición celebró la autoproclamación de Guaidó, líder de la Asamblea Nacional (Congreso).
La crisis política de Venezuela escaló en forma significativa, con efectos en los ámbitos nacional e internacional, luego que el líder de la Asamblea Nacional, el opositor Juan Guaidó, se autoproclamó “presidente encargado” y fue reconocido por la OEA y gobiernos de varios países.
Durante la jornada se registraron choques entre la Guardia Nacional Bolivariana y grupos de opositores, que causaron al menos una docena de muertos, mientras que en la arena internacional, el presidente Nicolás Maduro anunció el rompimiento de relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
Guaidó cuenta con el respaldo del Legislativo y el reconocimiento de Estados Unidos, Canadá y una docena de naciones latinoamericanas, así como de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En total 16 países reconocían a Guaidó como presidente interino de Venezuela: Estados Unidos, Canadá, Brasil, Colombia, Argentina, Chile, Perú, Paraguay, Ecuador, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Kosovo, Dinamarca y Georgia.
En tanto, Maduro tiene el aval del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), la Fuerza Armada y al menos ocho países, entre ellos, Rusia, Turquía, Cuba y Bolivia.