El tema de la inflación y el encarecimiento de productos, la falta de empleos y los estragos que sigue dejando la pandemia del COVID-19, lacera la economía de la población en general, sobre todo, para los comerciantes informales. Sin embargo, festividades como alusivas al mes patrio, próximamente el día de muertos o los eventos de fin de año, son una esperanza para incrementar ventas.
Quienes se dedican a la venta o renta de trajes o ropa regional, esperan que, en los próximos días, sus ventas aumenten, debido a que en las escuelas ya están realizando bailables y festivales.
Sin embargo, también han notado una disminución en sus ventas, ya que la ciudadanía prefiere adquirir artículos de primera necesidad, antes que destinar sus recursos en la compra o renta de ropa.
“No metimos los trajes tradicionales, los que están ahí poquitos, el negocio ha bajado demasiado y no nos arriesgamos a invertir… invitamos a que vengan a consumir, tenemos buen precio y variedad un poquito también”, dijo Noemí Méndez, vendedora en el mercado 5 de mayo.
Informa: Lizbeth Leyte