Empezar un año nuevo para algunas personas es sinónimo de nuevas oportunidades, de alegría, amor y paz… sin embargo, la realidad es que para muchos y muchas más, iniciar un nuevo año es equivalente a dificultades económicas.
Y es que la misma presión social, obliga a realizar compras de regalos y gastar en múltiples cenas, lo que genera un gasto excesivo que impacta fuertemente la economía de las familias.
A tal grado de tener que destinar todo su aguinaldo, o incluso, adquirir deudas para cumplir con estos compromisos.
“Tus compras van a ser a meses sin intereses, revisa tu presupuesto, si te va a alcanzar con el dinero que estás ganando, cubriendo tus gastos básicos más la mensualidad de meses sin intereses”, expuso Rene Cruz, economista
Y aunque cada año, la recomendación es elaborar un presupuesto, comparar precios antes de adquirir un producto y evitar participar en todos los intercambios de regalos, la emoción por estrenar diversos artículos, aunado a las mismas iniciativas del gobierno federal y empresas, como El Buen Fin, obligan a las personas a gastar su dinero en artículos que incluso no necesitan.
“Tienes una pantalla de 40 pulgadas que compraste el año, funciona bien, a lo mejor lo sacaste a 20 meses sin intereses y todavía lo estás pagando y resulta que se te ocurre comprarte una pantalla de 48 pulgadas”.
De acuerdo con la Condusef, en estas fechas el gasto promedio por persona es de 19 mil pesos, de los cuales, más de 8 mil pesos son únicamente para los obsequios, esto por mucho inferior a lo que perciben en su sueldo, lo que genera una deuda que de alguna manera se tiene que pagar.
Enero y agosto, son los meses en donde más personas acuden a dejar sus artículos de valor, incluso esos mismos regalos que recibieron en Navidad.
Si este es tu caso, lo recomendable es que para el siguiente año hagas una correcta planeación de tu dinero, ya que, si gastas todo en fiestas y regalos, una vez más puede que tengas problemas incluso para cumplir con otras obligaciones como el pago de deudas, predial, tenencia, reinscripciones, diversos servicios, incluso, perder la posibilidad de comprar un activo de mayor valor y beneficio personal.
Informa: Lizbeth Leyte