A media quincena de junio el INEGI puso el dedo en la llaga al revelar un incremento desmedido en los precios de diversos productos básicos sin que ninguna instancia haya si quiera metido las manos.
Las alzas van desde uno hasta 12 pesos, de golpe y porrazo, en insumos como el azúcar, cuyo kilo paso de 10 a 11 pesos o el cono de huevo que se disparó de 40 a 51 pesos; o por ejemplo la posta de carne de puerco que paso de 68 a los 80 pesos, en un abrir y cerrar de ojos.
Esto definitivamente merma la economía de las familias que no se esperaban estos incrementos en los precios, cuyo escenario, tristemente esta manejado por los coyotes y los especuladores que tienen en sus manos el control de un importante número de productos.
Pero palo dado ni Dios lo quita y la PROFECO así como otras instancias ni pio dicen, permitiendo estos duros golpes a la economía de las familias chiapanecas, eso sin contar que muy pronto también las tarifas del transporte correrán la misma suerte.
Entonces nosotros nos preguntamos, ¿qué está haciendo la PROFECO en Chiapas para evitar estos abusos? ¡Por qué tanta complacencia para los especuladores que manejan a su antojo el mercado!
Hasta el siguiente comentario.