Durante los días festivos del mes patrio, el Instituto Mexicano del Seguro Social “brindará atención médica continua”, declaró al iniciar la semana, Yamil Melgar, delegado de la institución.
Dijo que atendería las urgencias y mantendría los servicios de hospitalización en los hospitales generales de zona en Tapachula y Tuxtla Gutiérrez, y en las sub-zonas de Huixtla y Tonalá, con “un equipo que trabajará las 24 horas”.
Desde luego que es plausible que en días de descanso obligatorio en que muchas veces aumenta la demanda de los servicios médicos se refrende la atención, aunque, para nadie es ajeno que es obligación que todas las instituciones que conforman el sector salud del país deben disponer de “guardias” para atender las incidencias que se presenten.
El señor delegado también habló del reinicio de las actividades normales a partir del lunes 19 de los corrientes, y de paso recordó a los patrones que: “es el último día para pagar sus cuotas y evitar multas o recargos”.
Y ya que el funcionario en mención está tan pendiente de que el IMSS, así como exige al sector patronal el cumplimiento de sus obligaciones, también sería justo que los derechohabientes de la región Mezcalapa, siguieran recibiendo la atención médica que merecen en el consultorio-extensión de Copainalá, que de manera inexplicable fue cerrado desde enero del presente año, por lo que los pacientes tienen que trasladarse hasta la unidad número 21 que se encuentra en Chicoasén, recorriendo grandes distancias en caminos y carreteras en pésimas condiciones, sobre todo en temporada de lluvias.
Ah, por cierto, y por si fuera poco, el tramo Chicoasén-Copainalá, ha permanecido bloqueado en las últimas semanas… pero ese es otro tema que seguirá dando de qué hablar, porque en los próximos días los habitantes de la zona han anunciado marchas de protesta, porque no es posible que estén incomunicados, con todas las consecuencias negativas que ello conlleva…