A propósito de la campaña Septiembre, Mes Internacional de la Concientización del Cáncer Infantil, seis menores atendidos en el Hospital de Especialidades Pediátricas (HEP) del IMSS-Bienestar, ubicado en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas lograron superar el cáncer después de cinco años de vigilancia, gracias a la detección oportuna y tratamientos gratuitos.
Las y los niños, que tocaron la simbólica Campana de la Esperanza para celebrar su recuperación definitiva, tienen entre 11 y 17 años y son originarios de los municipios de Comitán, Copainalá, La Independencia, San Cristóbal de las Casas, Tuxtla Gutiérrez y Tuzantán.
Los menores fueron diagnosticados con tumor de Wilms (cáncer de riñón) con metástasis única en pulmón, tumor de Wilms bilateral, linfoma de Hodgkin mandibular, leucemia linfoblástica aguda (LLA) y leucemia mieloide aguda.
La especialista adscrita al área de Oncología del hospital, Mayra López Ruiz, destacó el caso de un menor diagnosticado con leucemia mieloide aguda, quien recibió la última quimioterapia en octubre de 2022 y en febrero de 2023 se le realizó un trasplante de médula ósea en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIMFG), en la Ciudad de México.
Puntualizó que los casos de leucemia mieloide aguda son poco frecuentes y solo 50 por ciento de los infantes logra superarlo; otros requieren trasplante de médula ósea para alcanzar la curación.
La especialista recordó que, en años anteriores, la tasa de supervivencia en el HEP era baja porque muchos pacientes llegaban en etapas tardías, lo que impactaba directamente en los resultados del tratamiento.
Hizo un llamado a las madres y padres de familia y a la ciudadanía en general a estar atentos a la salud de los menores y acudir a cualquiera de las más de 11 mil unidades médicas del IMSS-Bienestar en el país, “ya que, si el cáncer se detecta a tiempo, puede ser curable”.
El coordinador del HEP, Rafael Heberto Guillén Villatoro, mencionó que, hasta el mes de agosto, se habían realizado más de 21 mil quimioterapias en esta unidad médica.
La Campana de la Esperanza es un símbolo de la victoria y de la lucha constante contra el cáncer infantil y representa un nuevo comienzo para las y los niños y adolescentes y sus familias.