Que estarán pensando aquellos presidentes municipales quienes están más preocupados por su futuro político que por su compromiso con sus comunidades y que concluye hasta septiembre del próximo año, si es que antes no los ponen de patitas en la calle.
Nos referimos en especial a quienes han optado por irse nadando de a muertito pensando que el destino jamás los alcanzaría, pero no contaban con que los diversos fenómenos naturales registrados desde septiembre los pondrían en jaque por su incapacidad de responder a las emergencias presentadas y claro, papa gobierno tuvo que intervenir para hacerles la tarea.
Los casos se han documentado en diversos municipios, pero el colmo se dio en el municipio de Larrainzar donde un deslizamiento de ladera colapso una comunidad, en especial una vivienda que fue sepultada por el lodo con un saldo de 5 niños fallecidos.
Y es que resulta por demás inaceptable que algunos alcaldes estén reprobados en la materia de prevención de desastres.
Estamos de acuerdo que la naturaleza no tiene palabra de honor y nos puede sorprender en cualquier momento, sin embargo la obligación de los citados presidentes municipales es trabajar en lo que les toca para evitar catástrofes, producto de las fuertes lluvias y desbordamiento de ríos… pero ahora veremos con que pretextos van a salir alguno que otro alcalde ahora que los frentes fríos hagan de las suyas, están a tiempo de activar los protocolos necesarios para salvaguardar a la población ante las bajas temperaturas que se avecinan, veremos si cumplen…