Perfil de opinión, sábado 28 de octubre

por Notinúcleo Networks

Ahora resulta que de nada sirvió que el pasado 16 de septiembre el titular del Seguro Social a nivel nacional haya venido a Chiapas a poner la primera piedra de lo que sería el gran Hospital de Tapachula, porque un nuevo conflicto toca a las puertas orquestado entre transportistas de carga, igualito que cuando sabotearon la edificación de la presa Chicoasén II.

De acuerdo a diferentes versiones hechas públicas, se está gestando un agarrón entre transportistas de carga encabezados por la diputada y dirigente estatal de la CTM, María de Jesús Olvera con el Sindicato de Trabajadores de las Industrias en General, del Comercio, Servicios, Gastronomía y Hotelería, cuyo reconocimiento está avalado por la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.

Diversas voces han denunciado que la CTM piensa que tiene todo el derecho de meterse y apropiarse de cualquier obra donde huela a ganancias millonarias sin importar a quien pisotea o a quien deja en la calle, utilizando siempre su mismo modus operandi, es decir, mandando bloquear calles o carreteras.

Ante este escenario donde ya se escuchan los tambores de guerra, bien valdría la pena que alguien vaya a poner orden antes de que las cosas pasen a mayores y otro gran proyecto de beneficio social se vaya al bote de la basura

El citado hospital del IMSS tenía proyectado instalar 180 camas con una inversión de por lo menos mil 400 millones de pesos y a como están las cosas, Chiapas no podría ni debería darse el lujo de dejar escapar una obra como esta, en momentos en que se requiere también de fuentes de empleo y mejores condiciones para miles de pacientes en el Soconusco, pues para nadie es un secreto el hecho de que el IMSS y sus servicios ya están rebasados por la gran demanda que existe…

Hasta el siguiente comentario.

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