Desde la ONU fue denunciada la expulsión de migrantes de África por Túnez.
El jefe de la ONU denunció este martes las “expulsiones” de migrantes del África subsahariana realizadas por Túnez por las fronteras de Libia y Argelia, abandonados a su suerte en pleno desierto, donde algunos han muerto, según el portavoz de Antonio Guterres.
Estamos profundamente preocupados por la expulsión de migrantes, refugiados y solicitantes de asilo desde Túnez hacia las fronteras con Libia y Argelia”, alertó Farhan Haq en un punto de prensa en la sede de la ONU en Nueva York.
Varios han muerto en la frontera con Libia y, según nuestras informaciones, centenares de personas, entre ellas embarazadas y menores, están atrapadas en condiciones sumamente difíciles con escaso acceso al agua y a alimentos”, denunció el portavoz adjunto del secretario general.
Centenares de migrantes del África subsahariana llegan caminando diariamente a Libia en pleno desierto, tras ser expulsados por las fuerzas de seguridad de Túnez, según sus testimonios y los de los guardias fronterizos libios, recabados en los últimos días por la AFP.
Según organizaciones humanitarias en Libia contactadas por la AFP, al menos 17 personas han perdido la vida en las últimas tres semanas.
Las agencias de la ONU para los refugiados (HCR) y para las migraciones (OIM) reclamaron el pasado jueves “soluciones urgentes” para salvar a centenares de refugiados bloqueados en condiciones terribles.
Según la ONG estadounidense Human Rights Watch, desde principios de julio, al menos “1.200 subsaharianos” fueron “expulsados” por las fuerzas de seguridad tunecinas en las fronteras con Libia al este, y Argelia al oeste. La Media Luna Roja tunecina acogió a más de 600 en Ras Jedir, en la frontera entre Túnez y Libia, y a unos 200 de lado argelino.
Faq reiteró el llamado realizado la semana pasada por el HCR y la OIM “para que cesen inmediatamente las expulsiones y los que están atrapados en la fronteras sean instalados urgentemente en lugares seguros”.
Todos los migrantes, refugiados y solicitantes de asilo deben ser protegidos y tratados con dignidad, respetando plenamente los derechos humanos, independientemente de su estatus, en respeto al derecho internacional”, concluyó Haq.
Con información de Reuters