Las enfermedades cardiovasculares (ECV), que incluyen problemas como enfermedades cardíacas y ateroesclerosis coronaria, son un desafío de salud pública en México, y son el resultado de afecciones como hipertensión, diabetes mellitus y enfermedad renal crónica, entre otras.
Algunas de las ECV más comunes son el infarto al miocardio, el infarto cerebral y la estenosis aórtica. Según la Organización Mundial de la Salud, estas enfermedades causan alrededor de 1,7 millones de muertes cada año.
Factores como la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, la obesidad y el tabaquismo contribuyen significativamente a estas enfermedades.
Estos factores de riesgo están estrechamente relacionados con nuestros hábitos de vida y condiciones socioeconómicas, subrayando la importancia de enfoques integrales en la prevención y tratamiento de las ECV.
En México, las enfermedades del corazón y la diabetes mellitus son las principales causas de defunción, según datos del INEGI. Es fundamental reconocer los síntomas de la cardiopatía isquémica, como la falta de aire, el dolor en el pecho y los mareos, especialmente en pacientes con otras afecciones.