En un operativo conjunto entre la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo y la Guardia Nacional (GN), fueron rescatadas 14 mujeres colombianas víctimas de trata de personas, quienes eran explotadas sexualmente en inmuebles ubicados en la Supermanzana 44 de Cancún y en Playa del Carmen.
Las investigaciones revelaron que el inmueble en Cancún operaba como una casa de citas, donde hombres llegaban en automóviles para recoger a las mujeres y regresarlas horas después. En ese lugar fueron rescatadas seis colombianas, quienes declararon haber llegado a México tras aceptar ofertas laborales falsas que prometían altos ingresos.
Enganchadas con promesas falsas y atrapadas por una deuda
De acuerdo con la FGE, las víctimas fueron contactadas por una compatriota que les ofrecía trabajo en una agencia de Cancún que buscaba “chicas guapas”. Como parte del proceso de reclutamiento, se les solicitaban fotografías en ropa interior o lencería. La mayoría de las mujeres provenían de contextos económicos precarios y aceptaron la oferta por la promesa de un salario atractivo y la cobertura de los gastos de viaje.
Al llegar a Quintana Roo, fueron trasladadas a un departamento en Playa del Carmen, donde les quitaron sus pasaportes y se les informó que tenían una deuda de 120 mil pesos. La única forma de saldarla era ofreciendo servicios sexuales.
Cada servicio tenía un costo de 2 mil 200 pesos, pero el desglose era alarmante: mil pesos se destinaban al pago de la deuda, 700 como comisión, 400 por “concepto de transporte” y solo 100 pesos quedaban para la mujer. A esto se sumaban gastos semanales de mil 500 pesos por el arrendamiento del departamento y 3 mil pesos adicionales por el “cuidado” de las víctimas. En caso de no cumplir con los pagos, se les imponía una multa de 400 pesos.
Investigación en curso y atención a las víctimas
Las 14 mujeres fueron trasladadas a las instalaciones de la FGE para rendir su declaración, la cual fue integrada a la carpeta de investigación correspondiente. También se dio aviso al Consulado de Colombia y al Instituto Nacional de Migración para brindarles atención consular y protección.
Las autoridades continúan con las diligencias para identificar a los responsables y desmantelar por completo la estructura criminal detrás de estos hechos.